TERCERA SEMANA




 Esta semana nos dedicaremos a analizar una de las estrategias de crecimiento más efectivas que se ha implementado en algunas empresas con sede en Alemania, tales como DaimlerBayerSiemens y SAP, es considerar el puesto de “Direktor Grundsatzfragen” (se traduce como “Director de Preguntas Fundamentales”) dentro de la estructura organizacional.

Asimismo ponemos a su disposición el material que encontrará en el siguiente vínculo: PREGUNTAS PODEROSAS

Una vez que usted se familiarice con este material debe responder a las preguntas que encontrará en el siguiente formulario:  FORMULARIO

Con este material y la investigación que pueda realizar en otras fuentes participará en el Foro que se ha organizado para la cuarta semana y donde estarán involucrados todos los miembros que conformen esta cohorte. 


INTRODUCCIÓN

Las empresas mencionadas tienen todo un departamento conformado por personas cuyo trabajo principal es pensar constantemente en cuáles podrían ser las próximas preguntas que la empresa tiene que responder para asegurar su crecimiento y expansión.

Si nos acercamos a analizar lo que podemos lograr a través de las preguntas nos daremos cuenta del gran poder que tienen: 
  • Son capaces de abrir las puertas al diálogo, 
  • Despertar interés en algún tema, 
  • Dan lugar a la creatividad, 
  • Al descubrimiento 
  • Y al pensamiento progresivo. 

Son el motor de nuestros pensamientos y nos conducen a darle una utilidad práctica al conocimiento.
Las preguntas son tan esenciales para el ser humano que todo lo que sabemos de nuestro mundo y del universo se gestó en la mente de alguien que tuvo curiosidad y la inclinación a cuestionar su entorno. 
No existe un sólo campo intelectual que no haya surgido de un conjunto de preguntas que impulsaron el pensamiento de sus pioneros. Los precursores en algún área más que grandes pensadores, ante todo han sido individuos capaces de engendrar preguntas significativas.
No es un secreto que las empresas y las personas que logran un mayor crecimiento son aquellas que desarrollan el arte de hacer preguntas y que perfeccionan su método de cuestionamiento indagando cada vez más en el estudio de sus respuestas. 
El arte de hacer preguntas poderosas e inteligentes es una práctica, un hábito que la gente y las organizaciones exitosas deben cultivar.
Si el arte de hacer preguntas es tan importante, ¿por qué no invertimos más tiempo y energía en formularlas?
Desde esta  perspectiva existen dos notables razones por las que esto ocurre: Primero, estamos inmersos en una dinámica tan acelerada que consideramos cualquier pausa como una pérdida de tiempo. 
Las respuestas a nuestras interrogantes suelen ser las pausas del pensamiento, el proceso mediante el cual obtenemos conclusiones sobre nuestras dudas y lo que requerimos para continuar comprendiendo nuestro entorno. Sumidos en este vertiginoso ritmo de vida, resulta una tarea titánica  incorporar la reflexión como una práctica no solo viable, sino necesaria.  La reflexión es imprescindible para el adecuado desarrollo mental y emocional de las personas. Cuando cultivamos la reflexión, cultivamos la práctica del cuestionamiento.
Segundo, no nos enseñan a cuestionar lo que vemos, lo que escuchamos, lo que leemos e incluso lo que aprendemos. Nuestro sistema educativo se ha centrado más en la memorización de datos y la repetición de respuestas que en la habilidad de cuestionar lo que somos capaces de percibir a través de nuestros sentidos e incluso, aquello que no podemos ver o sentir. De alguna manera nos hemos conformado con recibir información sin objetarla, sin analizar de que manera esas ideas y conocimiento nos proporcionan la oportunidad de inquirir y hallar posibilidades innovadoras para tomar decisiones o acciones claves en nuestra vida o trabajo.
Entonces, ¿cómo sabemos si estamos ante una pregunta poderosa e inteligente?
La respuesta es sencilla: una pregunta poderosa e inteligente es capaz de trascender mayores límites. Si pregunto ¿qué hora es?, recibiré una respuesta que me llevará a una ubicación del tiempo y quizás nada más, pero si pregunto ¿qué determina la hora que es ahora?, entonces estoy accediendo a otro repertorio de preguntas que darán lugar a un análisis más profundo.

 Como vemos, sólo cuando una respuesta evoca otras preguntas, se hace posible que el pensamiento continúe la exploración y por ende, se manifieste el descubrimiento de otros niveles de conciencia, lo que constituye la clave de la evolución en todo el sentido de la palabra. Dicho de otra forma, no existe posibilidad de acceder a nuevos mundos y aspectos de la vida que aún desconocemos si nos limitamos a hacer preguntas pobres y superficiales.

Una mente que genera preguntas de forma activa es una mente que está involucrada con un aprendizaje sustancial y de fondo. Contrario a lo que se piensa, uno puede darse cuenta si una persona ha comprendido algo en la medida en la que hace preguntas cada vez más profundas. Las preguntas superficiales suelen ser un indicador de una comprensión superficial, de la misma forma como las preguntas confusas suelen serlo de una comprensión equivalente. Por eso es que las preguntas tienen la capacidad de potenciar nuestra inteligencia, porque estimulan la reflexión, el pensamiento productivo y garantizan el aprendizaje efectivo.